Empecemos con lo más fácil. La sección superior de la plantilla es un espacio para rellenar información como el propietario del proyecto, los miembros del equipo, el estado actual y una breve descripción de cómo este proyecto encaja en tu estrategia más amplia. 

Una de las muchas cosas buenas de un cartel de proyecto es que se trata de un documento vivo. Sigue actualizándolo a medida que el proyecto evoluciona para que todos puedan ver la información más reciente.

Piensa muy bien en el problema que intentas resolver antes de entrar en el meollo del proyecto, lo que te ayudará a captar la razón por la que lo vas a llevar a cabo.

¿Cuál es el problema? ¿Cómo afecta a los clientes o a tu equipo? ¿Cómo sabrás que lo has resuelto? ¿Cuáles son algunas de las posibles soluciones que se te ocurren?

Esos son los tipos de preguntas en los que pensarás y escribirás aquí; pero con calma, es probable que vuelvas a visitar esta sección varias veces antes de seguir adelante con el proyecto e incluso puede que tengas que hacer algunos ajustes a medida que vayas recopilando más comentarios y datos relevantes. Es normal, todo forma parte del proceso de aprendizaje.

Seguramente habrás hecho muchas suposiciones al definir el problema. En la siguiente sección de la plantilla se te proporciona un espacio para probarlas con hechos y números.

Aquí hay dos secciones diferenciadas: una en la que enumerarás lo que ya sabes y otra en la que anotarás las preguntas que aún tienes que responder.

Por ejemplo, imagina que estás planeando rediseñar el blog de tu empresa para que resulte más fácil de usar. Tal vez ya sepas que el 56 % de los visitantes abandonan el blog tras leer una sola publicación; eso iría en el primer hueco de la sección de validación. No obstante, también quieres averiguar qué haría que permanecieran en la página durante más tiempo; eso va en el segundo hueco de esta sección.

Ten en cuenta que tu objetivo aquí es confirmar o refutar la solución que has ideado antes de seguir adelante. Si todavía no puedes hacerlo con seguridad, puede que tengas que volver al espacio del problema o pensar en otras posibles soluciones.

En esta sección final es donde pondrás el proceso en marcha. Ya has pasado por la ardua tarea de definir el problema y elegir una solución validada. Utiliza esta sección final para explicarla y resumir el motivo por el que un cliente deseará contar con esto. Hay espacio para compartir capturas de pantalla, bocetos y notas, además de un hueco para definir la escala y el alcance (como el tamaño del equipo que necesitarás).

El hecho de contar con todos los detalles ahora te ayudará a centrar tu atención en lo que realmente importa y a asegurar que el proyecto no se expanda más allá de tus competencias o tu habilidad.

Quieres que tu plan de proyecto sea el recurso centralizado para toda la información importante relacionada con ese proyecto. Escribe /link para incluir los materiales de referencia que puedan hacer falta. Ya sea un resumen creativo o un ejemplo que quieras que consulten, añade todo en esta página para que esté organizado y sea accesible.