Si eres gestor de proyectos, seguro que algún proyecto se ha complicado. Puede que el equipo dividiese la información del proyecto entre varias herramientas. O que una parte interesada no pudiese revisar el trabajo a tiempo y el cronograma se desmoronara. Al final, se habrán perdido recursos y tiempo.
Lean es la metodología más popular para mejorar la eficiencia en la gestión de proyectos. Los cinco principios de metodología lean ofrecen un marco para la mejora continua. Lo que tuvo su origen en la fabricación de automóviles ahora se utiliza en distintos sectores, incluido el desarrollo de software, aunque no es el único método.
También está DevOps, una combinación de prácticas, herramientas y filosofías culturales. DevOps se basa en la metodología lean. Permite a los desarrolladores y a los equipos de TI colaborar durante el ciclo de vida del producto. Los equipos dejan de estar aislados, por eso el desarrollo de los productos se acelera y ayuda a entregar los proyectos más rápidamente.
Analizaremos las diferencias entre los principios de DevOps y lean para que puedas elegir la metodología que mejor se adapte a tu proyecto.
¿Qué es la gestión de proyectos lean?
La gestión de proyectos lean pone fin al despilfarro en el desarrollo de productos y acelera significativamente la entrega.
El objetivo es detectar los problemas antes de que provoquen graves perjuicios. Así podrás hacer los ajustes necesarios para evitar que el proyecto se estanque.
Al igual que la metodología en cascada, lean es un proceso estructurado que organiza las tareas y permite la supervisión. En lugar de tener 5 etapas comunes, lean se basa en 5 principios fundamentales.
¿Cuáles son los 5 principios de la metodología lean?
La metodología lean gira en torno a 5 principios clave: la definición del valor, la planificación del flujo de valor, la creación de un flujo, la adhesión a un sistema de incorporación de cambios y el mantenimiento de un estado de mejora continua.
Analicemos los principios de la producción lean; el valor del cliente será tu indicador:
- Define un valor: ¿qué actividades llevan a perder tiempo? ¿Cuáles añaden valor al proyecto? Esa es la distinción que debes hacer. Ten en cuenta a tus clientes. Directa o indirectamente, ¿les aporta valor tu esfuerzo? "Una de las claves para identificar el valor es centrarse en eliminar las actividades innecesarias", afirma Mark Cruth, orientador de trabajo moderno de Atlassian. "Analiza las siete formas de despilfarro e intenta eliminarlas de tu proceso: espera, transporte, procesamiento, inventario, movimiento, defectos/retrabajo y sobreproducción".
- Asigna el flujo de valor: el segundo principio requiere una visualización de las actividades de valor de tus clientes. Esto te permite centrarte en la tarea y avanzar, sobre todo si utilizas un estilo de gestión ágil de proyectos como scrum. Para ello, puedes utilizar un tablero de kanban como el que ofrece Jira.
- Crea un flujo: el objetivo es que tu proyecto fluya. Cualquier impedimento puede resultar perjudicial. Permanece atento a cualquier posible obstrucción. En caso de haberla, analiza la causa y cómo salvarla. Por ejemplo, las obstrucciones suelen ocurrir a la espera del feedback de las partes interesadas. Para evitarlo, reduce las partes del trabajo para revisar.
- Establece la incorporación de cambios: ofrecer nuevos trabajos a tu equipo cuando está al límite de su capacidad puede obstaculizar el flujo. Empieza un nuevo trabajo solo cuando haya demanda y tu equipo tenga tiempo. Un sistema de incorporación de cambios crea una cola de trabajo, lo que significa que un miembro del equipo que no tenga trabajo en un momento dado puede incorporar cambios en el primer ticket de alta prioridad y centrarse en él.
- Busca la perfección: la mejora continua es la base de la gestión de los proyectos lean. Tu situación y la de tu equipo debería ser mejor que la de ayer. Analiza el rendimiento e identifica las oportunidades de mejora. Recuerda que quieres asegurarte de ofrecer valor al cliente. Si algo no funciona, busca el motivo y realiza cambios graduales según corresponda. Las métricas de los KPI son muy útiles a la hora de estimar el rendimiento de la metodología lean.
¿Qué es DevOps?
"Muchas metodologías y modelos tienen su origen en lean, por lo que sus principios están presentes en todos los métodos de trabajo modernos", explica Cruth.
DevOps, por ejemplo, es la combinación de prácticas, herramientas y filosofías culturales diseñadas para ofrecer más valor al cliente de forma rápida eliminando las barreras entre los equipos de desarrollo y operaciones.
Con el modelo DevOps, los desarrolladores ya no están aislados y participan en todo el ciclo de vida del desarrollo de software. Este enfoque interdisciplinar contribuye a que los equipos reduzcan el plazo de comercialización, garanticen la calidad de la entrega y apliquen procesos a escala. DevOps también es compatible con otros métodos, por lo que no tienes por qué elegir entre DevOps y la metodología ágil.
Un equipo de DevOps utilizará todas las herramientas de esa caja, desde los procesos automatizados hasta los recursos tecnológicos, para obtener resultados de forma más rápida y eficiente. Con Open DevOps en Jira, los desarrolladores pueden conectar más de 170 complementos e integraciones de terceros para facilitar todas las partes del proceso de desarrollo, incluida la planificación, la compilación, la integración continua, la implementación, las operaciones, la recopilación de comentarios y la comunicación en tiempo real.
Principios de DevOps frente a lean
Entonces, ¿qué método elegir: lean o DevOps? Vamos a compararlos.
- Orientación al cliente: ambos métodos se centran en el cliente. En la metodología lean, tú eliges las actividades de valor de los clientes que importan. DevOps crea una asignación de imágenes de empatía con el cliente que divide los objetivos empresariales de modo que el cliente pueda comprenderlos.
- Enfoque: los principios de metodología lean buscan optimizar todo el proyecto. DevOps pretende integrar el desarrollo y las operaciones mediante la colaboración entre equipos y la documentación.
- Ejecución frente a visión: la metodología lean se centra en mejorar la ejecución para obtener mejores resultados, pero los objetivos de DevOps son más ambiciosos. Aprovecha los equipos interdisciplinares y la automatización para realizar cambios sistémicos en una empresa.
- Automatización: DevOps se centra en la automatización. Lean, no. Con la automatización, DevOps emplea la tecnología para comprobar e implementar el código, ejecutar pruebas y hacer solicitudes de incorporación de cambios. Así no tendrá que hacerlo alguien de tu equipo manualmente.
- Cronogramas: los plazos de la metodología lean se centran en los sprints, que pueden extenderse durante meses. DevOps a veces requiere la entrega por horas.
Si quieres profundizar en DevOps, hemos creado una guía para principiantes de DevOps que te ayudará.
Incorporar los principios de metodología lean en la gestión de proyectos
A la hora de elegir la metodología que quieres utilizar, considera cómo afectará a tus clientes. ¿Qué método va a servirles mejor, un enfoque de metodología lean o DevOps? En última instancia, lo importante es el valor que les aportas.
Sin importar cuál ofrece mayor valor al cliente, Jira de Atlassian puede ayudarte. Se adapta tanto a los principios de metodología lean como a DevOps.
Jira hace un seguimiento de los proyectos y mantiene a tu equipo coordinado. Podrán ver la carga de trabajo y el progreso de tu proyecto. Los equipos colaboran en DevOps hasta el control de calidad para lograr una integración, una entrega y una implementación continuas, lo que aumenta la capacidad que tiene tu equipo para entregar según la planificación.
Principios de metodología lean: preguntas frecuentes
¿Es mejor DevOps o lean para la gestión de proyectos?
Si quieres aumentar la capacidad de tu equipo a la hora de entregar, DevOps debería ser tu elección para la gestión de proyectos. Por estos motivos:
- Termina con la división de los equipos: los equipos colaboran a lo largo de todo el proceso.
- Crea ciclos de feedback: el feedback continuo por parte del equipo y los usuarios ayuda a mejorar las entregas.
- Automatiza el trabajo rutinario: la automatización de tareas como la implementación de código y las solicitudes de incorporación de cambios permite a tu equipo centrarse en los aspectos más importantes del proyecto.
DevOps funciona bien en el desarrollo de software. Si vas a crear un producto digital, esta es la mejor opción, ya que se prioriza la colaboración entre equipos. En comparación, la metodología lean se centra principalmente en las mejoras de los procesos.
Usa Open DevOps con la tecnología de Jira para que tu equipo siga lanzando y gestionando software de gran valor para los clientes.
¿Qué ventajas ofrece la implementación de los principios de metodología lean?
Los principios de metodología lean hacen de tu equipo una máquina de combate austera e implacable. Esto se consigue gracias al aumento de la eficiencia y la mejora de la colaboración en equipo: podrás reducir los riesgos y evitar los cuellos de botella, con lo que se protegen los resultados.
Los principios de metodología lean dotarán a tu equipo con la mentalidad del crecimiento mediante la mejora continua para que puedan adaptarse más rápido y mantener el compromiso.
¿Cuál es la principal ventaja de implementar los principios de metodología lean? Una base de clientes más fieles y satisfechos.
¿Cuáles son algunos de los desafíos habituales en la implementación de la metodología lean?
Si bien la metodología lean puede ser ideal para la gestión de proyectos, presenta algunas dificultades como las siguientes:
- Falta de apoyo: si los gestores no ofrecen ayuda, las actividades de metodología lean podrían irse al traste. Pasan a ser los guardianes de toda la información del proyecto, así que debes consultarles para completar el trabajo.
- Solución: debes saber que los cambios pueden ser complicados para algunos. Sé empático y trata a los gestores con respeto para ganarte su confianza. Muéstrales las carencias en los flujos de trabajo y en qué les puede ayudar la metodología lean.
- Formación indebida: los equipos no tendrán resultados sin una formación en metodología lean. Avanzarán a trompicones e incluso pueden aumentar los cuellos de botella.
- Solución: forma a tu equipo adecuadamente en los principios de metodología lean. Crea un documento con las "prácticas recomendadas" para el equipo. Deja claras las expectativas con el equipo antes de embarcarte en un proyecto de metodología lean. Además, define un ciclo de feedback.
- Expectativas poco realistas: esperar que tu equipo haga más de lo que es capaz también puede ser perjudicial.
- Solución: define plazos y objetivos realistas. Revísalos con tu equipo antes, durante y después del proyecto. Supervísalos cada semana.
- Dar demasiada importancia a las herramientas: las herramientas son buenas, pero son mejores cuando las usan las personas. Sin embargo, algunas empresas que implementan la metodología lean se centran más en las herramientas que en la cultura de equipo.
- Solución: sé transparente y crea una cultura de confianza. Puede que la filosofía lean de mejora continua te ayude a mostrar tu inversión en el crecimiento del equipo.